Para ir al trabajo, a la universidad, al gimnasio ¡o a lo que quieras! Cuando encuentras la mejor bicicleta eléctrica plegable para tu caso concreto, esa que cubre con creces todas tus necesidades de desplazamiento, la llevas a todas partes contigo. Y hoy queremos ayudarte a que la consigas.
¿Cómo? Pues explicándote todo lo que debes saber sobre este tipo de bicicletas para que puedas valorar la que mejor combina con el uso real que vas a hacer de ella. Porque… ¿de qué sirve comprar una bici carísima si luego no tiene las características que necesitas en tu día a día? Así que, para no cometer ese error, lee este post hasta el final y toma una decisión sólida y acertada.
Mucha gente tiene en mente que una bicicleta plegable, cuanto más pequeña y ligera sea, mejor. Pero no siempre es así. Es decir, hasta cierto punto la estructura debe ser lo suficientemente ligera como para poder transportarla sin ayuda. Hasta ahí bien. Sin embargo, hay otros aspectos que hay que tener en cuenta antes de decantarte por la bici que tenga las ruedas más pequeñas del mercado.
¿Cómo qué? Pues como por ejemplo la distancia que vayas a recorrer con este medio de transporte. También hay que valorar que, puesto que tienes interés en una eléctrica y no una tradicional, el peso siempre será algo mayor, por lo que no debes analizar solo ese parámetro.
Más adelante analizaremos de forma pormenorizada cada uno de estos aspectos. Pero lo que queremos que tengas claro, de primeras, es que para escoger la que consideres la mejor bicicleta plegable eléctrica para este 2021 debes analizar muy diversos elementos y definir cómo afectan a tu caso concreto.
Dicho esto, estudia detenidamente cada uno de los puntos que te comentamos en las próximas líneas para poder elegir la bici perfecta para ti.
Aspectos a valorar en tu caso concreto
Los kilómetros a recorrer
¿Para qué trayectos vas a utilizar tu bici? Puede que la necesites para ir a la oficina a diario, pero también para el gimnasio, a tu academia de inglés o a esa cafetería a la que sueles ir a adelantar trabajo. Examina cuáles serán tus recorridos habituales, cuántos kilómetros tiene cada uno y la dificultad del relieve que entrañan.
Es decir, no solo debes fijarte en la distancia, sino también en si en el camino hay muchas cuestas o zonas de tierra. Esto te ayudará a definir posteriormente un montón de características que necesitas, como la potencia de la batería, el tamaño de la rueda, la necesidad de diversas marchas o de un guardabarros.
Los medios de transporte
En tu trayecto, ¿sueles coger diferentes medios de transporte? Si por ejemplo sales del bus para coger el metro o el tren, quizá la agilidad y la comodidad para llevar la bici plegada son dos aspectos claves para tu caso. Además, también debes tener muy presente la facilidad del plegado. Sí, porque no es lo mismo que la bici tenga varios niveles de plegado a que estos sean sencillos de llevar a cabo.
Lugar donde guardarla
¿Qué dimensiones tiene la zona en la que vas a guardar la bicicleta? Analiza tanto la zona de casa donde la vas a tener como el lugar donde la guardarás en destino (ya sea dentro de la oficina, del gimnasio o en los aparcamientos de la universidad). En función del espacio disponible, también necesitarás una bicicleta que se pliegue en más o menos niveles y que, tras aplicarlos, ocupe un menor volumen.
Elementos a analizar en cada modelo
Ya sabes todo lo que debes analizar de tu propio entorno antes de ponerte a buscar la mejor bici eléctrica plegable para tu caso concreto. Muy bien. Una vez que lo tengas todo claro, tendrás que examinar exhaustivamente las características técnicas de cada uno de los modelos que tienes en mente. Así, poco a poco irás descartando aquellos modelos que no se adaptan a ti y, a la vez, te acercarás cada vez más a esa bici que es, sencillamente, ¡perfecta para ti!
1. Facilidad de plegado
Si los sistemas de plegado de una bicicleta son engorrosos, de nada sirve la estructura en su conjunto, sobre todo si necesitas plegarla y desplegarla varias veces al día. Existen diferentes mecanismos para este pliegue y, cada uno de ellos, determinará otros aspectos de la bici.
Pliegue dividido
Empecemos, por ejemplo, con el típico mecanismo de pliegue dividido. Se trata de un método que utiliza una bisagra en la mitad de la bicicleta y divide la estructura en dos (aunque sin separarlas del todo). Este sistema suele ser muy fácil de utilizar, pero al tener un material rígido y estable, sobre todo para evitar movimientos indeseados mientras el usuario la usa, suele ser un poco más macizo. Esto deriva en un mayor peso de la estructura en general.
Sin embargo, este tipo de pliegue es bastante seguro y duradero, lo que lo convierte en uno de los favoritos de los bike lovers. Además, es muy sencillo de manipular y el pliegue es bastante rápido. La desventaja es que no suele plegar demasiado la bici.
Pliegue de bisagra triangular
Los mecanismos de bisagra triangular, por su parte, hacen que la bicicleta en su conjunto se pliegue bastante más, lo que viene fenomenal si tienes poco espacio en el transporte público para llevar la bici contigo.
Sin embargo, el tiempo de plegado aumenta bastante, por lo que es un aspecto a tener en cuenta si lo que queremos es inmediatez para pasar de unas dimensiones a otras.
Pliegue Easyup
Las bicis con este tipo de plegado, como la Ossby Curve, no solo permiten un plegado muy rápido (en 1 solo segundo y con 1 solo paso se reducen las dimensiones de la bici a la mitad), sino también el plegado en diferentes zonas de la estructura.
El resultado es un sistema que deja una bicicleta de tamaño muy reducido al plegarse y que, además, permite la posibilidad de bloqueo del cuadro una vez plegado. Esto resulta un plus para los amantes de las bicicletas eléctricas plegables que, en más de una ocasión, han visto cómo su medio de transporte se abre repentinamente en el lugar menos adecuado.
2. Potencia de la batería
El máximo de potencia que puede tener una bicicleta eléctrica en España es de 250 W. Si se supera este límite, pasará a considerarse ciclomotor eléctrico, por lo que tendrá que tener matrícula, pasar las inspecciones pertinentes y tener seguro de responsabilidad civil.
Sin embargo, tener una batería mucho menor a los 250 W no te garantizará una buena autonomía o la fuerza suficiente para subir pendientes pronunciadas. Pero todo depende de cómo ayudes con tu pedaleo a la bicicleta, ya que si apenas vas a necesitar la ayuda del motor o tu recorrido es muy corto, puede que no necesites tanta potencia. En cuanto a la autonomía, para que te hagas una idea, la de la bicicleta eléctrica plegable Ossby Curve Electric es de 70 km, que cuenta con el máximo de potencia permitida.
3. Tamaño de las ruedas
En cuanto al tamaño de la rueda, debes tener en cuenta que, cuanto mayor sea, más peso sumará a la estructura de tu bici pero, a su vez, más recorrido tendrá con cada pedaleo. Por tanto, debes encontrar el equilibrio entre la cantidad de kilómetros que necesitas recorrer, la potencia de la bici, tu capacidad de pedaleo y el tamaño de las ruedas.
Es decir, si coges unas ruedas con un diámetro muy amplio, avanzarás más usando la propia fuerza de tu pedaleo, porque, con cada uno de ellos, tendrás un mayor recorrido. No obstante, esas ruedas grandes harán que el plegado sea mucho menor y, además, pueden sumar peso a la estructura. Las ruedas de la mejor bicicleta eléctrica plegable para tu caso concreto son aquellas en las que haya un equilibrio entre todas estas variables.
Las de 16 pulgadas o menos son perfectas para trayectos urbanos de unos 20 kilómetros como máximo. Las que cuentan con 20 pulgadas (que son las más comunes dentro del mercado de las plegables) suelen tener una oferta más amplia en cuanto a neumáticos mixtos. Y si ya nos vamos a las de 24 o 26 pulgadas (muy poco usadas dentro de las opciones plegables) puedes encontrar bicis ideales para ir por terrenos más abruptos, incluso por montaña, pero con un peso bastante mayor y con una capacidad de pliegue mucho menor.
4. Cambios de marchas
Por poca cuesta que te encuentres en tu camino hacia el trabajo o la universidad, es casi imprescindible que tu bici cuente con algunas marchas. Si bien es cierto que cada velocidad requiere de un mayor número de piñones (lo que aporta peso), tener al menos 3 velocidades es ideal para garantizarte cierta comodidad en cualquier desnivel sin necesidad de apoyarte al 100% en el motor eléctrico.
Aquellas que cuenten con varios platos y piñones, aunque resulten muy cómodas como bicis tradicionales, serán bastante pesadas, por lo que te será muy complejo manipularlas, por ejemplo, para subirlas y bajarlas del tren o el autobús.
5. Peso/material del cuadro
El material del cuadro es la clave para saber si tu bici va a pesar más o menos de lo que te resultará cómodo para transportar. También es importante elegir bien su resistencia frente a golpes o pequeños saltos, así como la robustez de las soldaduras de unión. Pero, claro está, todo ello repercutirá en el precio. Para que puedas elegir la bici ideal para ti, aquí tienes un pequeño análisis de los materiales más utilizados en el sector.
Acero
Empecemos por el más utilizado y, además, el más económico. Esta materia prima es la que más pesa de todas las que vamos a analizar, una desventaja si tienes que transportar arriba y abajo tu bici a diario. No obstante, ofrece una gran resistencia frente a vibraciones o roturas, ya que con el acero se consiguen unas soldaduras muy robustas.
Aluminio
Este material es perfecto para la fabricación de bicicletas que, si bien resultan hasta 3 veces más ligeras y flexibles que las de acero, siguen teniendo un precio asequible. Pero en caso de que vivas en una zona costera, te aconsejamos que la cubras con una funda si la vas a guardar en exterior, ya que el cuadro podría oxidarse más rápidamente.
Fibra de carbón o titanio
La fibra de carbón es un material muy resistente y ligero, pero hay que tener en cuenta que los cuadros elaborados con él cuestan, solo la pieza, más de 1.000 €. Y si hablamos del titanio, más aún. Aunque se trata de una materia prima de propiedades únicas, su uso se reduce a unos pocos modelos. De hecho, es más común verlo en bicis de competición que en bicis plegables para uso cotidiano.
6. Niveles de plegado
¿Tienes muy poco espacio para guardar tu bici en casa? Entonces necesitas una que tenga varios niveles de plegado. Es decir, que no solo se pliegue en la parte del cuadro para disminuir su envergadura total, sino que también lo haga en el manillar o los pedales para reducir el espacio que ocupa a la mínima expresión.
En caso de que tengas que utilizarla a diario, es importante que esos niveles de plegado sean muy sencillos y rápidos de usar. En caso contrario, puede que varias veces por semana te quedes atascado en la puerta del metro intentando desplegar los pedales o el manillar. Además, una vez desplegado, el sistema debe ser lo suficientemente seguro como para garantizar que los pliegues están perfectamente sellados. Vamos, que la bici no se te abra a mitad del camino.
Si a este respecto necesitas la mejor bicicleta plegable eléctrica del mercado, en definitiva, la que cuente cuente con todas estas características de plegado, te aconsejamos que le eches un vistazo a nuestro sistema Easyup. En 1 solo segundo y con 1 solo movimiento, la bici se pliega a la mitad y podrás transportarla sobre las ruedas. Pero antes de hablar de nuestra Ossby Curve Electric, continuemos con los el resto de accesorios que deben tener estas bicis y las ventajas que tiene contar con ellas en tu día a día.
7. Accesorios
Un buen guardabarros es el accesorio básico para cualquier bicicleta urbana. Sí, porque si la vas a usar a diario para ir a la oficina o a casa de algún familiar, no querrás llegar con los pantalones llenos de salpicaduras o tierra. Por ese motivo todas nuestras bicicletas plegables lo llevan incorporado 😉
Por otra parte, contar con una luz delantera y trasera, así como con una pata de cabra o soporte para el móvil, son extras que siempre vienen bien. No obstante, estos últimos puedes incorporarlos en cualquier momento, ya que son fáciles de instalar y existen cientos de ellos en el mercado.
Ventajas de la mejor bicicleta plegable eléctrica
Ahora que sabes cómo elegir la bicicleta eléctrica plegable perfecta para ti (y por si te queda alguna duda sobre si debes o no hacerte con ella), aquí tienes los argumentos definitivos para convencerte sobre cómo puede mejorar tu experiencia de transporte. Partiendo de la base de las ventajas que poseen los desplazamientos en bici en general tanto para tu salud como para la del planeta, ahondemos un poco en aquellas específicas de las que cuentan con motor eléctrico y capacidad de plegado.
- Menos esfuerzo: Si escoges la bici con las características apropiadas para tu caso concreto, seguro que conseguirás llegar a tu destino con un menor esfuerzo y sudor que si utilizaras cualquier otra. Porque un motor que te ayude en las cuestas es clave para llegar a cualquier lugar hecho un pincel.
- Facilidad de transporte: Al tener una bicicleta con un buen sistema de plegado podrás pasar de un medio de transporte a otro… ¡en cuestión de segundos! Sube sin complicaciones al metro o al bus con la estructura plegada y sin que pese tanto como para no poder con ella.
- Sencillo almacenaje: No importa si tu piso es pequeño o si tu oficina no tiene mucho espacio. Lo bueno de las bicicletas que tienen múltiples niveles de plegado es que podrás guardarla en cualquier lugar. Ahora sí, recuerda medir bien el área de almacenaje antes de decantarte por un modelo u otro.
¿Cuál es la mejor bicicleta eléctrica plegable de 2021?
Vale. Ya hemos analizado todo: el peso, los sistemas de plegado, las ruedas… Ahora queda decidir cuál es, analizando todos los parámetros y siempre de forma genérica, cuál es la bici eléctrica plegable de este año 2021. Pero antes de decirte cuál es, mejor explicamos primero el porqué.
Peso
Solo 13,5 kg. Como lo lees. Las bicis eléctricas plegables más ligeras del mercado suelen rondar los 17,5 kg, pero esta pesa 4 kg menos. ¿Cómo lo consigue? Gracias a un cuadro elaborado en aluminio y a su sistema eléctrico incorporado en la rueda trasera, que mide apenas 14” (la delantera tiene solo 12”). ¿Te empieza a sonar bien? Pues sigue leyendo, que queda lo mejor.
Plegado
Esta bici cuenta con un sistema de plegado Easyup. Esto significa que al tirar de una biela hacia arriba y con un solo movimiento (que tardas en realizar literalmente 1 segundo) la bici reduce a la mitad su tamaño y te permitirá desplazarla sobre las ruedas. El manillar y los pedales también se pliegan de forma muy sencilla. Al plegar todos los mecanismos, la bici pasa de medir 93x120x55 cm a 93x70x22 cm. Además, como las ruedas siguen libres al plegar la bici, puedes apoyarla en el suelo y llevarla fácilmente empujándola con una sola mano.
Motor
La batería, el motor y los sensores de esta extraordinaria bici se encuentran incorporados en la rueda trasera. Este sistema cuenta con 250W/30V/10Ah y te ofrece nada menos que 70 km de total autonomía. Y para cargarlo solo tienes que enchufar la entrada del eje en cualquier toma de corriente.
Marchas
¿Creías que con ese peso esta bicicleta no iba a tener marchas? Pues te equivocabas. Cuenta con 3 velocidades gracias a sus piñones de 11T, 13T y 15T. Pero además posee guardabarros de aluminio y frenos de disco con rotor.
Precio
Conforme te íbamos contando los detalles sobre este modelo, tú ibas haciendo la cuenta de cabeza de lo que iba a costar esta maravilla. Pues sea la que sea la conclusión a la que llegaste, te la vamos a echar por tierra. Por solo 1.690 € puede ser tuya.
Seguro que a estas alturas ya sabes del modelo que estamos hablando, la que sin duda es la mejor bicicleta eléctrica plegable para uso urbano: la Ossby Curve Electric. Ya conoces todas sus características y ventajas, así que solo te queda un último paso: ¡probarla!
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